Las etapas de la evolución de un perfume

La primera fase:

La Salida o Cabeza

La salida de un perfume es el primer olor que se presenta al inicio de su evaporación. Para componer la nota de salida el perfumista recurre a una nota de salida suficientemente fuerte para poder generar una idea de qué armoniosa combinación es la que viene. Dura unos cuantos minutos.

 

 

La segunda fase:

El Corazón

El corazón. Periodo muy importante en la evolución de un perfume, por su contacto con el medio exterior. La resultante olfativa deberá traducir, sin traicionar a ninguna, todas las notas de sus compuestos en un concierto agradable y melodioso. Dura algunas horas.

 

 

La tercera fase:

El Fondo

El fondo. No se puede decir en qué momento preciso inicia esta y termina la precedente, la segunda. La evolución de un perfume se realiza de una manera sutil. La más persistente, puede permanecer hasta días.

 

La Fijación.

Si consideramos que una fragancia es una mezcla armoniosa de notas provenientes de la naturaleza, y que cuanto menos volátiles sean, persistirán más, entonces entenderemos que gran parte de la fijación de un perfume la determina sus componentes.

Algunos estudiosos  han atribuido a ciertos componentes propiedades “fijadores”,  una acción conservadora con respecto a los productos más volátiles. Un fijador es simplemente una substancia cuyo olor persiste un tiempo suficientemente largo. La idea de fijar un perfume para retardar o impedir la evaporación de los constituyentes volátiles es quimérica.